¿A dónde viajar en Navidad en 2023? Los 11 destinos recomendados

Si pienso en Navidad, lo primero que me viene a la cabeza es Alsacia.

La Alsacia es una región de Francia que adapta sus pueblitos a cualquier época del año y en navidad no va a ser menos… En esta región descubriremos unos pueblos de cuento llenos de deco y espíritu navideño.

No te puedes perder Eguisheim, Turckheim, Kayserberg, Riquewhir, Colmar, Ribeauvillé, Bergheim y Obernai… Estos pueblos se recorren en poco más de dos horitas, con lo que en un día puedes ver dos o tres de ellos fácilmente.

Colmar es el más importante y por ello te diría que le dedicaras un día completo. A parte de ser más grande, es el que más ambiente tiene y cada día a las 18h de la tarde llega Papá Noel en su barca por el rio que cruza la ciudad.

No lo dudes y déjate sorprenden por la magia de la navidad en esta preciosa región francesa, Alsacia.

De nuevo Vigo apuesta por convertirse en un referente de los destinos navideños nacionales.

Desde el 21 de noviembre y durante dos meses, sus visitantes disfrutarán de un Vigo transformado en un gran parque temático en el que sus once millones de luces convivirán con otros muchos elementos clave como su mercado navideño de inspiración nórdica, su noria panorámica, sus pistas y su rampa de hielo, su tobogán de nieve gigante, los trenes turísticos, atracciones para todas las edades, conciertos, etc., que harán de la ciudad un plan perfecto para visitar en familia, con amigos, en pareja o como prefiráis.

Laponia es un destino mágico para vivir la Navidad. En Rovaniemi podrás conocer a Santa Claus en diferentes lugares.

Podrás visitarlo de forma gratuita en Santa Claus Village o con excursiones como la que realizamos nosotros en solitario a su casa en medio del bosque nevado. El mirará que estés en su lista de buenos para confirmarte que recibirás tus regalos y allí mismo te hará uno muy especial.

También podrás disfrutar de un increíble paisaje nevado y realizar excursiones con moto de nieve o trineo, ir en busca de auroras boreales y hacer un picnic en una kota.

Te recomendamos alojarte en una cabaña de madera y pasar una noche en un iglú de cristal con alarma de auroras boreales.Una experiencia única en el Círculo Polar Ártico.

Si aun no conoces la capital inglesa o simplemente te apetece repetir, Londres es un destino fantástico para disfrutar la Navidad.

Las avenidas se cubren de espectaculares iluminaciones y los escaparates sacan a relucir sus mejores galas. Por supuesto, también encontrarás pequeños mercados navideños en distintas zonas de la ciudad y el gigantesco Winter Wonderland en Hyde Park.

¿Y si te apetece patinar con vistas? Pues no tienes más que acercarte a la pista de hielo frente al Museo de Historia Natural. Londres ofrece toda la esencia navideña sin renunciar a las ventajas y encantos de una gran ciudad.”

Bergen es llamada la Ciudad entre Siete Montañas. El centro de Bergen se convierte en pueblo de galletas de jengibre.

La tradición de elaborar dulces navideños entre sus habitantes está muy arraigada y desde 1991 se construye una maqueta de ciudad a base de galletas de jengibre.

Este año, Bergen acogerá una edición especial del tradicional mercadillo del 12 de noviembre al 22 de diciembre, que se levantará en el centro de la ciudad, en la plaza  Torgallmenningen   con un enorme Árbol de Navidad.

Ucrania fue nuestro último destino antes de la pandemia. Tres meses después el mundo se puso patas arriba. Es por eso por lo que para nosotros no representa un viaje más, sino el último recuerdo que tenemos de la vida de antes, cuando palabras como mascarilla, PCR, cuarentena, o QR, simplemente, no existían para el viajero.

Estuvimos cinco días en Kiev y la capital ucraniana nos deslumbró porque ofrece todo lo que un trotamundos puede anhelar para pasar la última noche del año: la ciudad exhibe un pulso joven y muy dinámico con gente por todas partes que no teme al frío; sus iglesias y catedrales ortodoxas no tiene nada que envidiar a las de la mismísima Moscú; su parques nevados son un inspiración para el paseo, y los mercadillos navideños harán las delicias de los estómagos más exigentes con productos típicos no solo de Ucrania, sino también de antiguas exrepúblicas soviéticas como Georgia o Armenia. Si a todo eso le sumamos que los precios para un bolsillo medio occidental son tremendamente económicos, se obtiene la combinación perfecta para una escapada navideña.

Y para los que echen de menos una pequeña dosis de aventura, animamos a contratar una excursión a la central nuclear de Chernóbil y la ciudad abandonada de Prípiat. Sin duda una de las vivencias más intensas y sobrecogedoras de nuestra experiencia viajera.